CITAS Y AFORISMOS
"Es una experiencia verdaderamente fascinante, te olvidas de todo, de todas las preocupaciones, de todos los problemas, toda tu atención se centra en no caerte, es un deporte en el que interviene todo el cuerpo. Produce una enorme sensación de libertad sentirse tan cerca de las rocas, de la naturaleza, de las montañas, cuando alcanzas la cima sientes tal felicidad que quieres volver a experimentar esa sensación lo más a menudo posible".
Leni Riefenstahl

Citas y aforismos

«Es mejor no decir nada, si aquello que se tiene que decir no es más importante que el silencio».
(Apotegma budista)

«Es necesario ser profundos para poder realmente ascender».
(Gabriele Adinolfi)

«Envejecer es como escalar una gran montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena».
(Ingmar Bergman )





«Si al franquear una montaña en la dirección de una estrella, el viajero se deja absorber demasiado por los problemas de la escalada, se arriesga a olvidar cual es la estrella que lo guía».
(Antoine de Saint-Exupery)

«Mucho más que una disciplina para el cuerpo, el alpinismo es un lujo para el espíritu y un recurso para el alma».
(Georges Sonnier)

«Necesito de la acción. La idea, la creación de una idea son para mi importantes pero sin la acción, una idea és sólo la mitad».
(Reinhold Messner)

«La vía de las alturas está iluminada por una sola luz, la luz del valor que está encendido en tu corazón. Cuanto más oses más alto ascenderás».
 (Antigua enseñanza mahayánica)

«Signo de verticalidad, puente entre lo bajo y lo alto, la función de la montaña consiste en comunicar las dimensiones terrestre y celeste. Semejante a un atanor alquímico, la ascensión realiza la mutación del plomo en oro puro. Las revelaciones acontecen sobre las cumbres».
(Marie-Madeleine Davy)

«Vosotros miráis hacia arriba cuando buscáis elevación, yo miro hacia abajo, porque estoy elevado. Decidme, ¿quién de vosotros puede reír y a la vez estar elevado? El que asciende a las más altas montañas se ríe de todas las tragedias: de las del teatro y de las de la vida».
(Friedrich Wilhelm Nietzsche)




« La cosa grandiosa de la montaña es que no tolera mentiras.
Allí arriba no se puede mentir ni tan siquiera a nosotros mismos».
(Heinrich Harrer)

«La montaña es maestra de sabiduría, y quien asciende contigo tiene que ser como un hermano, porqué el reto a la naturaleza no tiene término medio, ni deja espacio para las simulaciones: si te equivocas, pagas.»
(Pio Filippani Ronconi)

«Las montañas no son estadios donde satisfacer nuestra ambición deportiva, sino catedrales donde practicar nuestra religión».
(Anatoli Boukreev)

«El camino hacia la cima es, como el viaje hacia uno mismo, una ruta en solitario».
(Alessandro Gogna)

«Las montañas constituyen un mundo aparte:
son menos una parte del planeta que un reino independiente,
insólito y misterioso, en el que las únicas armas
para aventurarse son la voluntad y el amor».
(Gaston Rebuffat)

«¿Hemos vencido a un enemigo? A ninguno, excepto a nosotros mismos. ¿Hemos ganado un reino? No, y no obstante sí. Hemos logrado una satisfacción completa, hemos materializado. Luchar y comprender, nunca el uno sin el otro, esta es la ley.»
(George Mallory)





«Desgraciadamente, todavía nos acercamos a las montañas con mucho más deseo de conquista que interés por entender su real dimensión. Yo creo que la montaña nos ofrece una enorme posibilidad de orientación hacia fuera y también hacia dentro de nosotros mismos. Si destruimos las montañas antes de que la humanidad comprenda ese verdadero valor, entonces el hombre perderá para siempre la posibilidad de disfrutarlas y buscar esa dimensión más profunda».
(Reinhold Messner)

«En un sueño lejano las hube imaginado, como castillos que se alzan, como guerreros del pasado. De ellas aprendí la enseñanza: firmeza, grandeza, serenidad. En ellas veo la esperanza contra el tiempo y la modernidad. ¡Silencio! Me piden ellas para estar. ¡Silencio! Para en ellas caminar. ¡Silencio! Amar y respetar. ¡Silencio! Para poderlas escalar».

«Cuánto más alto suba, más hundiré mi mirada en las profundidades de mi ser»
(Reinhold Messner)

«Si deseas escalar una montaña comienza por la cima».
(Aforismo Zen)

«Cuando llegues a la cima de la montaña, sigue subiendo».
(Proverbio Zen)

«En la alta montaña no hay lugar para lo fantástico, pues la realidad es en sí misma más maravillosa que todo lo que el hombre pudiera imaginar».
(René Daumal)

«En la embriaguez de aquella hora, pasada allá arriba aislado del mundo, en la gloria de las alturas, es suficiente para justificar cualquier locura»
(Giusto Gervasutti)




«Lo primero de un alpinista es más su cualidad humana, que su condición física»
(Pierre Mazeaud)

"Es necesario aprender a apartar la mirada de sí para ver muchas cosas: esa dureza la necesita todo aquel que escala montañas"
(Friedrich Nietzsche)

«Las montañas son maestros mudos y hace alumnos taciturnos».
(Johann Wolfgang von Goethe)

«La montaña no se burla del río porque este corre por debajo, como tampoco se ríe el río de la montaña porque ésta permanece inmóvil.»
(Lin-Yutang)

...había dicho un amigo italiano, la regla de las tres s: "La montaña hace al hombre silente (silencioso), sofferente (sufriente) y sobrio, ya que facilita la reflexión, pide silencio y forja una personalidad sobria, sin caprichos".

“Al sobrepasar nuestras limitaciones, al tocar las últimas fronteras del mundo de los hombres, hemos llegado a conocer algo de su verdadero esplendor. En mis peores momentos de agonía descubrí el profundo significado de la existencia, del cual hasta entonces no había sido consciente”. (Maurice Herzog)



«La perfección del arte es una cumbre luminosa y vivificante en la que ningún sendero llega a ella, y que solo se puede alcanzar por el impulso de un vuelo divino».

«La montaña es un mundo a cuyo descubrimiento se ha entregado el hombre durante estos dos últimos siglos, movido, según justa expresión de Irving, por una amplia dosis de curiosidad, de amor a la aventura, de deseo apasionado de acceder a una revelación».
(E. Wyss)

«La montaña es de por sí una vía que el hombre puede emprender para elevarse por encima de las apariencias y las contingencias.
Trepar por la montaña da fuerza y resistencia y requiere mucha energía física y espiritual.
El duro y penoso camino que conduce a la cima es la ocasión de profundizar el conocimiento de sí mismo y perfeccionar la propia manera de vivir y ampliar la visión del mundo liberándose de nociones relativas del tiempo y el espacio».

«De las montañas emana una fuerza que nos llama hacia sus dominios, y allí están,
para siempre, nuestros amigos, cuyas almas grandes soñaron con las alturas.
No olvidéis a los montañeros que no han vuelto de las cumbres».
(Anatoli Bukreev)





«En las ascensiones hagamos largas paradas para descanso del cuerpo y para el disfrute del alma extasiada que dulcemente naufraga en el mar del infinito».
(Giuseppe Gugliermina)

«En la montaña el turista viene a buscar un panorama, el pensador encuentra un libro inmenso».
(Victor Hugo)

«No es más quién más alto llega, sino aquel que influido por la belleza que le envuelve, más intensamente siente».
(Maurice Herzog)

«La alta montaña tiene las cualidades del Nirvana.
Como la alta montaña es inmóvil, también así es el Nirvana.
Como la cima de la montaña es extraordinariamente elevada,
también así es el Nirvana.
Como la cima de la montaña es difícil ascender,
así la ascensión del Nirvana es difícil, a causa de las varias corrupciones a superar.
Como sobre la alta montaña ninguna semilla crece,
así en el Nirvana no se desarrolla ninguna corrupción.
Como en la alta montaña queda excluido todo miedo y aversión,
también así en el Nirvana queda excluido todo miedo y aversión».
(Milindapanha)
















«Permanecía yo entonces allí, de pie,
sobre la más alta de las montañas
y abajo, a mi alrededor, estaba el círculo del mundo.
Y mientras allí estuve contemplé más de lo que puedo describir
y comprendí mucho más que lo hasta entonces visto;
porque veía de un modo sagrado la forma de todas las cosas en el espiritu
y la forma de todas las formas,
como si todo viviera unido cual si fuera un único ser.
Y contemplé como el circulo sagrado de mi pueblo formaba parte
de los muchos circulos que componen el gran círculo,
amplio como la luz del día
y como la luz de las estrellas en la noche,
y en su centro crecía un árbol poderoso y florecido,
para cobijar a todos los hijos de una misma madre y de un mismo padre».
Y ví que esto era sagrado